Realizar actividad física que impacte contra la obesidad, la presión alta, la depresión y la diabetes,
además de mejorar el estado nutricional, son factores que pueden prevenir el Alzheimer,
padecimiento neurodegenerativo que altera diferentes áreas del cerebro, afirmó la especialista
en geriatría del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), doctora Zazil Ana Ramírez Espinosa.
Explicó que existen 14 factores de riesgo que pueden prevenir hasta 40 por ciento las demencias,
entre ellas, evitar el tabaquismo, la contaminación ambiental, discapacidad auditiva y visual,
aislamiento social, alcoholismo, baja escolaridad y traumatismos cráneo encefálicos,
particularmente en quienes realizan deportes de contacto como el fútbol americano y el soccer.
La doctora Ramírez Espinosa apuntó que para controlar los diferentes síntomas de Alzheimer, en
el Seguro Social se prescriben medicamentos para mejorar la memoria, antidepresivos y
antipsicóticos.
Se trata, abundó, de controlar los síntomas neuropsiquiátricos para que el día a día del paciente
sea mejor, al igual que para su cuidador.
Resaltó que las terapias cognitiva y física también buscan que el paciente pueda ser lo más
independiente el mayor tiempo posible, con un impacto en el plano económico, social y en su
calidad de vida.
Señaló que también se busca trabajar e instruir al cuidador y brindarle la mejor información para
que cuente con las herramientas para el cuidado del paciente.
Esta patología, dijo, es neurodegenerativa, se origina en cambios a nivel intercelular y en los
espacios que existen entre las células. Ello provoca alteraciones entre neuronas, lo que da paso a
una sinapsis (interconexión neurológica) incorrecta y cambios metabólicos intracelulares, lo que
da como resultado una conducta alterada.
Aunque existen casos en que se adquiere de forma hereditaria, el Alzheimer afecta mayormente
a personas mayores.
Y a pesar de que se le asocia con la pérdida de la memoria, comentó, también
se manifiesta con desorientación visoespacial, alteraciones del lenguaje, disminución
rendimiento laboral, errores para manejar recurso económico, cambios en el estado de ánimo y
en la conducta, como mucha tristeza e irritabilidad, por lo que quienes lo padecen requieren
tratamiento individualizado.
La especialista en geriatría del IMSS detalló que para brindarle los cuidados a quien padece
Alzheimer, se pretende establecer una rutina que coadyuve a facilitar la habituación de un adulto,
es decir, que concentre su atención en estímulos importantes para su supervivencia.
Por ello, se debe prestar atención a temas de nutrición, rehabilitación física y cognitiva, atención
psicológica y psiquiátrica, además de rehabilitación ocupacional, con el fin de preservar la mayor
funcionalidad e independencia en quien tiene Alzheimer.
Subrayó que en los tratamientos que se otorgan a los derechohabientes con este padecimiento
pueden intervenir rehabilitadores, audiólogos, geriatras, psiquiatras, neurólogos, psicólogos,
entre otros especialistas.



