No solo las instalaciones del IMSS están en deplorables condiciones, evidenciadas con las constantes lluvias de las últimas semanas, sino también la clínica del ISSSTE se encuentra «en las mismas», ya que se desprendió el plafón del área de urgencias y golpeó a una de las empleadas.
Conzencuencia de la humedad que ha generado goteras en varias partes del Instituto, el techo cedió y terminó por caer una parte del mismo, lo que exhibe la falta de mantenimiento al edificio.
En esta ocasión resultó golpeada una trabajadora, aunque afortunadamente, el material es blando, pero podría ser una parte de la infraestructura de mayor grosor que podría derivar en una desgracia.
Por otro lado, la clínica está llena de goteras para las que se usan desde botes de basura y todo tipo de recipientes para que caiga en agua en los mismos y evitar el encharcamiento.
Las condiciones en que se opera y atiende del Instituto de Seguridad Social para los Trabajadores del Estado son, por decir lo menos, deplorables y lamentables.
