Aunada a las dificultades por el crecimiento de la violencia e inseguridad en el municipio de Guadalupe y Calvo, se suma una crisis social por el despido injustificado de, al menos, cien trabajadores por parte de la alcaldesa Ana Laura González Abrego.
Los afectados por la decisión arbitraria de la nueva titular del Ayuntamiento de Guadalupe y Calvo, tenían una antigüedad de entre los 4 a los 18 años, además de que dos personas estaban incapacitadas cuando se les notificó de su despido.
Así lo expresó Juan Villalba, quien fungía como asesor jurídico de la Presidencia Municipal y que contaba con ocho años de antigüedad al momento de ser separado de su encargo con la llegada de la nueva administración el 9 de octubre de 2024.
“Ni las gracias nos dieron, nos dijeron que no teníamos derecho a nada, y háganle como puedan, fuimos más de 100 trabajadores que fuimos despedidos”, agregó.
Villalba manifestó que “este despido genera una crisis social en el municipio porque existe mucho desempleo y ahora esas familias de los cien trabajadores que fuimos despedidos pues nos agrava la situación”.
Al cuestionarlo sobre la inseguridad por los enfrentamientos entre grupos criminales, comentó: “sume usted que si está hostil la situación, es muy estresante, los negocios abren solamente mediodía, el desempleo creció, el poco empleo lo generan el hospital, la presidencia, los maestros, y el aprovechamiento forestal”.
Lamentablemente no han tenido los trabajadores despedidos ninguna atención de la autoridad municipal, algunos han arreglado su situación al recibir mucho menos de finiquito de lo que por ley les corresponde, apuntó.
Sobre la alcaldesa Ana Laura González Abrego, Juan Villalba mencionó que ella dice que no le van a hacer nada, pero que, aún así,.continúan con su defensa legal
Refirió que él se fue por la vía del amparo y una treintena de sus compañeros se sumaron a esta estrategia legal que, en nueve meses, han logrado que se constituya el Tribunal, reciba las demandas laborales y, en estos momentos, ya emplazaron a la Presidencia Municipal que tiene un plazo para responder lo que a su causa convenga.
“En nuestro grupo de 30 trabajadores despedidos no existe ninguno que haya sido personal de confianza o que tenga una antigüedad de reciente ingreso, nuestros compañeros van unos de 4 años, pasando por 6, 8, 12 y hasta un caso de 18 años de antigüedad”, precisó.
Para concluir, Juan Villalba comentó que esperan que finalmente los tribunales les reconozca sus derechos laborales y obliguen a la presidenta municipal, Ana Laura González Abrego, a remediar esta mala decisión.