Tras el escándalo por la agresión hacia un guardia de seguridad del Fraccionamiento Bosques de San Francisco por un residente identificado como Osvaldo Palma N., quien, con una pistola golpeó al encargado de vigilancia y además disparó al piso, un nuevo video sugiere que fue el vigilante quien habría iniciado la agresión.
Lo anterior porque, supuestamente, descargó su molestia debido a que, días atrás, su padrastro, quien también se desempeñaba como guardia de seguridad del Residencial, fue despedido, razón por la que el humor del portero se encontraba deteriorado e impactó contra un habitante que, al parecer, no podía abrir la pluma de seguridad y solicitó que le dieran acceso.
La videograbación del exterior de la caseta de vigilancia del Fraccionamiento Bosques de San Francisco, revela que el vigilante golpeó primero a Osvaldo P. N. y después a su acompañante para luego correr a refugiarse a la caseta.
Derivado de lo anterior, Osvaldo sacó un arma y disparó al suelo, persiguiendo al empleado de seguridad hasta la caseta donde lo golpeó y pateó, en represalia por su actitud violenta, luego de negarles el acceso porque «no los conocía».
Aun así, el guardia interpuso una denuncia ante la Fiscalía General del Estado la mañana de este domingo, tras atenderse en un hospital por lesiones en la cabeza y en los pies.
Los hechos sucedieron alrededor de las 10 de la noche del sábado cuando llegó un automóvil en el que viajaban dos hombres, uno de ellos, quien vive en el Fraccionamiento, pidiendo que les dieran acceso, a lo que el vigilante se negó por las razones ya expuestas, derivando en la molestia del primero y emprendiendo una discusión verbal que culminó en agresiones físicas.
Este domingo, agentes estatales catearon una vivienda y recabaron evidencia para proceder legalmente contra el agresor del guardia, quien estaría enfrentando el delito de homicidio en grado de tentativa.
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Por su parte, el Consejo de Administración de Bosques de San Francisco, informó que el agresor es un residente y que sí accionó el arma de fuego para intimidar, amenazar y golpear al personal de seguridad, quien cumplía con el protocolo de identificación y registro de ingreso, establecido para salvaguardar la seguridad de los residentes.
«Desde la formación de Bosques de San Francisco hemos promovido valores como el respeto, la tolerancia, la empatía, la moral, la integridad y la ética. No permitiremos que actos violentos y fuera de la legalidad vulneren nuestra comunidad y sus principios fundamentales», se lee en un comunicado emitido por el Consejo.