Menos de 24 horas después de concluir las Jornadas Villistas más desorganizadas y pobres en contenido, el presidente municipal de Parral sale a anunciar un saldo blanco durante el desarrollo de las mismas.
Saldo blanco, asegura el alcalde. ¡Y cómo no! Si para él no sucede nada, porque no hace nada. Y no es una aseveración lanzada al azar, sino basados en que la remodelación del Parque Puerta del Tiempo y la rehabilitación del Periférico, obras insignia que presume como propias, son de Gobierno del Estado.
¡Es más! Dando crédito a que fuesen por gestión del geodiputado Francisco Sánchez y los 60 u 80 millones de pesos, aún así dejan fuera de la jugada a César Peña.
Saldo blanco porque el pasto sintético para el maltratado y abandonado Gran Estadio lo puso Obras Públicas del Estado y su titular, Mario Vázquez, pidió aparecer solo ante los medios cada vez que anunciaba algún avance.
Para reafirmar aún más el saldo blanco en las gestiones del alcalde, la tumba de Villa la presumió como propia Alfredo Lozoya, aunque en la placa no aparezca su bondad. De hecho, el micrófono únicamente le perteneció al también excandidato a gobernador.
El nombramiento de Pueblo Mágico lo hizo la Secretaría de Turismo federal por gestión del diputado Edgar Piñón, mismo que también tocó tantas veces la puerta de la delegación en Chihuahua de la Comuniciones y Transportes.
En la Sesión Solemne del Congreso del Estado por el centenario de la muerte de Francisco Villa, desarrollada en Parral, Peña Valles pasó sin pena ni gloria, ante la presencia de los tres poderes del Estado.
Viéndolo así, pues sí, hay saldo blanco en Parral, porque hay un presidente que sigue «en blanco», sin dar con bola, sin creérsela y, cuando tiene algún momento de lucidez, inmediatamente le recuerdan que su posición es de membrete ¡y a veces ni eso!
Hay saldo blanco en el gabinete también, porque no le queda ningún funcionario nombrado por él y los que se atrevió a meter a la nómina, ya se los sacaron a todos y le han impuesto hasta los que no puede ni ver como a Bueno, Payán, Gutiérrez y Díaz.
Saldo blanco porque en su mundo no ha habido golpizas a opositores al régimen naranja, ni ha sido capaz de emitir un posicionamiento sobre Orquiz o Jurado, o mínimo de Arzola, su compadre.
Saldo blanco porque no hay extorsiones en los retenes, ni maltratos, ni detenciones arbitrarias; ni asaltos al comercio, o lo que es peor, terrorismo y persecución desde el poder.
Pero eso sí: «¡Vamos a intensificar la promoción como pueblo mágico!», presume con la instalación de la insignia en las letras que reciben a los visitantes del norte.