El activista Luis Tenorio, quien ha encabezado las recientes manifestaciones contra la Junta Municipal de Agua y Saneamiento, cumplió la advertencia que lanzó ayer de plantarse en el edificio de Gobierno del Estado este martes si no se resolvía en 24 horas, tiempo contado a partir del lunes 11 de diciembre, el problema del desabasto de agua en Parral, lo que, evidentemente no sucedió.
Juan Plancarte, director Ejecutivo de la JMAS, los atendió de nueva cuenta y fue increpado por el vocero de los protestantes, quien le cuestionó si además de él se encontraba en el lugar algún miembro del Consejo Consultivo o Juan Bustillos, líder sindical de la Junta, pero ninguno estaba presente.
«La bronca es contra todos: la administración, el consejo y el sindicato», sentenció Tenorio, puesto que, a su consideración, ninguno de los tres los representa, dijo, por lo que entregó a Plancarte dos hojas que contienen, en 10 puntos, las peticiones que «como ciudadanía organizada», realizan, detalló.
Luis Tenorio, cara visible de «Resistencia Civil» exigió atención expedita y sin demoras a sus exigencias, de lo contrario, advirtió que no permitirán cobros en varias oficinas gubernamentales.
En orden de importancia, enumeró en primer lugar el desabasto de agua en más de 20 colonias de Parral, afectando no solamente viviendas, sino también escuelas y negocios.
Como segundo punto pide la «no autorización de los recibos del año 2024», refiriéndose al aumento en las tarifas como medida de actualización del índice inflacionario del 4.6 por ciento, así como detener el aumento mensual en los cobros «que también fue autorizado por el Consejo Consultivo», afirma el documento.
Los manifestantes piden un alto total a los tandeos de la distribución del agua por estar, consideran, desordenados y por ser injustos, puesto que vulneran la economía al tener que conseguir agua con particulares, aunado a las fugas que descomponen la tubería y de las cuales, la JMAS culpa a los usuarios.
Un punto a destacar es que los manifestantes piden que se les permita estar presentes en las sesiones del Consejo Consultivo «porque siempre se toman decisiones a puerta cerrada, sin considerar a los usuarios», expusieron, al tiempo que sentenciaron que, de no aprobarse esta exigencia en particular, solicitarán la cancelación de dicho Consejo.
De igual forma pidieron la remoción de la dirigencia sindical, ya que los agremiados atienden de mala gana a la ciudadanía y son prepotentes, «sintiéndose intocables por estar, precisamente, sindicalizados», acusaron.
Resistencia Civil propuso realizar pagos en la medida que se ofrece el servicio «pagando solo lo que se reciba mes con mes hasta que sea normalizado», al igual que desaparezca la llamada cuota de arranque porque es injusta y «amañada», calificaron.
Reclamaron además supuestas modificaciones a las lecturas de los recibos y que ya no aparecen, lo cual no da certeza de los cobros, por lo que solo pagarán «metro cúbico por metro cúbico y no en bloques», dijo literalmente Tenorio, y agregó que mucho de lo que se cobra «es aire», considerando que un pago justo serían 100 pesos mensuales.
Así mismo, lamentó que no exista una autoridad federal que pueda calibrar los medidores por lo que exigen que sean remplazados.
Por último Luis Tenorio, a nombre de la «ciudadanía organizada», insistió que que ni la Administración de la JMAS, ni en Consejo Consultivo de la misma, ni tampoco el Sindicato de Trabajadores los representa y entregó documento firmado a Juan Plancarte, titular de la Junta.
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