Redacción de ‘El Papelerito’
A menos de 24 horas de los enfrentamientos armados que sembraron el pánico en la cabecera municipal de Guadalupe y Calvo, se ha confirmado extraoficialmente privación ilegal de la libertad de Edgar Martínez, hijo del exalcalde Rigoberto Martínez Melchor, quien hasta el momento permanece desaparecido.
Los hechos se registraron durante la noche del viernes y la madrugada del sábado, cuando presuntos integrantes del crimen organizado protagonizaron una intensa balacera con elementos de la Guardia Nacional en los barrios La Periquera y Coronado, lo que dejó un saldo oficial de tres agresores abatidos.
En un inicio, trascendió el secuestro de un comerciante local, dado que la víctima fue sustraída por un grupo armado de una vivienda contigua a una tienda de abarrotes. Sin embargo, familiares y allegados aclararon más tarde que se trata de Edgar Martínez, quien actualmente labora como encargado del área de Sistemas Computacionales en los Servicios de Salud de Chihuahua.
De acuerdo con la versión de personas cercanas al caso, los agresores ingresaron al domicilio de Edgar —ubicado en el barrio La Periquera— y lo sacaron por la fuerza, presumiblemente para usarlo como rehén o escudo humano en medio del enfrentamiento con las fuerzas federales. Desde entonces no se ha sabido nada de su paradero.
La familia del desaparecido ha expresado su profunda consternación por el hecho y exige su liberación, asegurando que Edgar es una persona ajena a cualquier actividad ilícita y que su vida se ha desarrollado en el ámbito profesional y familiar, sin vínculos con grupos criminales.
Rigoberto Martínez Melchor, padre de la víctima, fue presidente municipal de Guadalupe y Calvo por el Partido Revolucionario Institucional (PRI) entre 1995 y 1998, y desde entonces su familia ha permanecido en la comunidad.
Los hechos ocurren apenas unos días después de que se celebrara, en ese mismo municipio, una Mesa Estatal de Construcción de Paz, encabezada por la gobernadora Maru Campos y altos mandos de seguridad de los tres niveles de gobierno, quienes anunciaron medidas para reforzar la vigilancia y recuperar la tranquilidad en esta región de la Sierra Tarahumara.
Hasta el momento, ninguna autoridad ha confirmado públicamente el motivo del secuestro ni ha ofrecido una actualización oficial sobre el paradero de Edgar Martínez. Sin embargo, la Fiscalía General del Estado continúa con las indagatorias y el despliegue de operativos en la zona que dejó como saldo dos presuntos sicarios abatidos y la detención de dos civiles armados que, incluso, fueron internados el hospital para ser atendidos por las heridas de bala durante su enfrentamiento con elementos de las Células BOII.
No se estableció relación directa de los hechos, pero sucedieron simultáneamente.