Ángel, el joven de 15 años que resultó herido de bala tras la riña campal que se desató en Punto Alegre durante un convivio, perdió la vida en el Hospital General de Parral, hasta donde había sido trasladado para recibir atención médica.
El adolescente era hijo de Juana Flores, la mujer de 36 años que también recibió balazos de un sujeto que sacó un arma al calor del pleito, y que murió anoche mismo.
En las primeras indagatorias ministeriales se conoció que las víctimas se encontraban en una reunión familiar, cuando sobrevino una pelea, y uno de los presentes sacó un arma de fuego con la que disparó y lesionó a las víctimas, luego huyó con rumbo desconocido.
Especialistas de la Unidad de Servicios Periciales se hicieron cargo del procesamiento de la escena y del traslado del cuerpo al Servicio Médico Forense para realizar la necropsia de ley.
La Fiscalía General del Estado reitera su compromiso para otorgar justicia a las víctimas de los delitos, así como de someter a la acción de la ley a los infractores.