La Presidencia Municipal de Allende aclaró que el mensaje que se difundió el día de ayer en el que pedían a los habitantes a no salir de casa, salvo que fuese estrictamente necesario, no es, bajo ningún motivo, un toque de queda impuesto por la autoridad local, sino una invitación a la ciudadanía a resguardarse por la situación de violencia que se suscitó en la región en los últimos días.
Alberto Montes, de la Coordinación de Comunicación Social del Municipio, señaló que fue una recomendación para quien, voluntariamente y de acuerdo a sus actividades y necesidades, deseara atenderla, pues la obligación como gobierno local es velar por la seguridad de la población, y tal como lo indicó el alcalde Rafael Payán, los incidentes no sucedieron en Allende, sino en cercanías, por lo que, insistió, la comunidad se encuentra en calma.

Respecto a las versiones de que jóvenes estudiantes que habitan en Valle de Allende y estudian en el Tecnológico de Parral optan por regresarse temprano a su lugar de origen, así que tengan que abandonar las clases, Montes dijo desconocer tal situación, pues no compete a Presidencia, sino a las instituciones educativas, tomar las providencias que consideren, y únicamente supo que algunas escuelas de la cabecera municipal sí suspendieron clases.
A pregunta expresa, dijo que se mantendrá la recomendación de resguardo, más no de toque de queda, hasta que la coordinación con la Guardia Nacional, el Ejército y Fiscalía del Estado, indique que existen condiciones favorables para «regresar a la normalidad», y que espera que la violencia cese pronto.



