El fiscal general de Chihuahua, César Jáuregui, informó que el caso que se sigue contra el ex auditor Jesús Manuel Esparza y dos de sus hijos, se debe a una investigación que está a cargo de la Fiscalía Anticorrupción y no de la General del Estado.
Asimismo, indicó que en la FGE no se tienen carpetas abiertas contra Esparza Flores, quien fue acusado este fin de semana por el delito de peculado, así como dos familiares directos, cuyas iniciales son I.G.E.G. y R.A.E.G., a quienes calificó como probables cómplices auxiliadores, ya que, presumiblemente, involucró en esta acción violatoria de la ley ya que habrían depositado un millón 891 mil 840 pesos a sus cuentas personales.
La carpeta de investigación iniciada en contra del ExAuditor, acredita la probable comisión de conductas delictivas, particularmente, la tipificada como Peculado, por haber dispuesto ilegalmente de la cantidad de 5 millones 260 mil 600 pesos, ya que se habría hecho llegar a estos dos últimos, la cantidad de 985 mil pesos y 906 mil 840 pesos, respectivamente,entre los meses de diciembre de 2016 y enero de 2017, mencionó la Juez de Control
Dentro de la exposición presentada por los agentes del Ministerio Público, adscritos a la Fiscalía Anticorrupción, como resultado de una minuciosa investigación científica, técnica, pericial, contable y financiera, respetando los principios esenciales del procedimiento, se obtuvo que, siendo auditor superior del Estado de Chihuahua, J.M.E.F, con el auxilio de tres empresas facturadoras de operaciones inexistentes, hicieron llegar a las cuentas de I.G.E.G. y R.A.E.G., respectivamente, las cantidades antes mencionadas para solventar gastos personales.
Esto al ordenar a sus subordinados de la dirección administrativa de la ASE, el pago de dos facturas a una persona moral por supuestos cursos de capacitación, la primera por la cantidad de 3 millones 162 mil 600 pesos y otra por un importe de 2 millones 88 mil pesos, sin que esta hubiera prestado algún bien o servicio a la Auditoría Superior del Estado.
Posteriormente, esa persona moral, denominada BAUPRE NETWORKS, previo el cobro de una comisión del 1%, dispersó el dinero a las cuentas bancarias de otras dos facturadoras, identificada como SMARTBULDING y KABI GLOBALMARCK, mismas que transfirieron el recurso público a diversas cuentas, entre ellas la de J.M.E.F., así como a las cuentas personales de sus dos parientes directos, quienes finalmente utilizaron el capital sustraído al erario en gastos personales como pagos de créditos, vehículos y tarjetas de crédito. Dicha información se obtuvo a través de la Comisión Nacional Bancaria, debido al convenio de colaboración de la Fiscalía Anticorrupción con esa institución.
Finalmente, la jueza de Control concedió un plazo de 3 meses para la etapa de la investigación, mientras que las medidas cautelares, se mantuvieron para la totalidad de los imputados.