Tras anunciar que, derivado de los acuerdos nacionales entre Morena, el Partido del Trabajo y el Verde Ecologista de México para ir en alianza en las elecciones de 2024, será el PT quien siglará candidato a la alcaldía de Parral y no Morena, y que además el partido de los Aguilar en Chihuahua se aplicó de inmediato a la búsqueda de su abanderado, el primer nombre que trascendió fue el de Óscar Bujaidar.
Y tiene sentido si recordamos que, el empresario, se dejó ver en la gira que realizó la precandidata única a la Presidencia de la República por la coalición “Juntos Haremos Historia», Claudia Sheinbaum, en un abarrotado gimnasio, lo que llamó la atención de propios extraños porque hacía apenas unos días que había retomado su activismo en Movimiento Ciudadano, tras haber sido maltratado por los plenipotenciarios naranjas.
Bujaidar ha justificado siempre que su gusto por la política no está ligado a ningún partido y que él gusta de ayudar sin intenciones que vayan más allá de la filantropía, así que no vayan a malpensar que la pantalla que regaló en San Vicente fue porque ya se veía como candidato, aunque en política no existe ningún activista que se haya mantenido imparcial, ni siquiera la ola independiente que surgió hace 7 años y de la que no queda ninguno, porque todos terminaron cediendo a las mieles de las prerrogativas que otorga el pertenecer a algunas siglas y cuyo camino para llegar a un cargo de elección popular, es menos complicado que irse por la libre.
Al igual que pasará con el PRIAN, no será privativo que sea un petista (¿hay alguno además de los Aguilar?) quien abandere la causa de la 4T en Parral. De hecho, ni el mismo Óscar es militante, así que hay oportunidad todavía de que alguien más logre hacerse de la candidatura, incluyendo al mismo Otto Valles y a Pedro Villalobos, que lo de menos sería brincar – otra vez – a otro partido, si ya lo hicieron del PRI a Morena, y en el caso de Otto, primero al PVEM ¿qué más da un chapulineo más? ¡Todo sea por el bien el pueblo!
De hecho, tanto Valles como Villalobos también fueron llamados a entrevistarse para considerarlos dentro de la terna, porque ya no habrá encuesta, así que fueron dioquis los corajes que hicieron uno con otro y las desavenencias que mantuvieron por ver quien de los dos era más popular, si a final de cuentas la decisión ya ni siquiera recaerá en Cruz Pérez Cuellar. ¿No tendrán el teléfono de Lilia Aguilar? Otto comparte con la diputada federal la enemistad con Javier Corral y hasta los agravios sufridos.
Un dato, más que curioso, ocioso: ¿Y por qué no hablarle a Miguel Jurado Contreras? El inge tiene el mérito de haber sido la primera persona que llevó al PT al poder en Parral cuando César Duarte se lo arrebató al PAN, pero no lo afilió al PRI, al menos no de inmediato, sino que se candidateó por el del Trabajo en alianza con el Revolucionario Institucional. ¡No sean así! ¡Ni la burla perdona la raza!
¡O al otro Miguel! Ya ven que no está nada conforme con que lo midan contra Amín Corral, Ángeles Gutiérrez y Chava Calderón para la candidatura de la coalición azul-tricolor-amarilla. Así las cosas.
