Redacción de ‘El Papelerito’
La entrega total de uniformes escolares en Parral no fue resultado de una planeación eficiente del Ayuntamiento, sino de la presión directa ejercida por la Síndica Municipal, Dalila Villalobos, quien desde la semana pasada advirtió el rezago en la distribución y exigió esclarecer el manejo administrativo del programa.
Villalobos informó que, tras solicitar formalmente una comparecencia en Cabildo, finalmente se presentaron el director de Vinculación Educativa y el oficial Mayor, quienes confirmaron que la entrega del 100% de uniformes para los 16 mil 200 estudiantes quedó concluida apenas esta semana.
Un contraste notorio con la semana anterior, cuando aún existía un 10% pendiente, a pesar de que la administración municipal ya había presumido el éxito del reparto.
La síndica subrayó que fue gracias a la vigilancia permanente de la Sindicatura y al señalamiento oportuno del atraso que la dependencia aceleró el proceso. Ahora, queda una tarea más delicada: la transparencia.
Durante la comparecencia, Vinculación Educativa quedó obligada a entregar información detallada de los 17 proveedores involucrados en la confección y suministro de los uniformes, un dato que hasta ahora no había sido públicamente clarificado pese al presupuesto asignado al programa.
Por su parte, el oficial Mayor, Martín Flores, reconoció fallas en la planeación y se comprometió a “mejorar procesos” para evitar retrasos y falta de claridad en futuras ediciones.
Las declaraciones, sin embargo, dejan ver que la administración actuó solo después de ser señalada, y no por iniciativa propia.
Con este seguimiento, la Sindicatura reafirma su papel como contrapeso, mientras la ciudadanía continúa esperando que el Ayuntamiento explique con precisión cómo se asignaron contratos, cuáles fueron los criterios y por qué fue necesaria la intervención de la Síndica para que el programa finalmente se cumpliera.



