Redacción de ‘El Papelerito’
A pocos días de que concluya el año, el alcalde Salvador Calderón volvió a comprometer una fecha para la entrega de las obras de pavimentación que mantienen molestos a comerciantes y vecinos desde septiembre. Aunque aseguró que los trabajos serán concluidos “antes del 12 de diciembre”, la ciudadanía recibió el anuncio con escepticismo ante los múltiples incumplimientos previos en proyectos similares.
Las rehabilitaciones en las calles Zaragoza, El Rayo y Centenario comenzaron hace más de dos meses y, hasta ahora, el avance ha sido mínimo. Los cierres prolongados han afectado de manera directa al comercio establecido, que registra una disminución significativa en ventas, además de constantes dificultades para el tránsito vehicular.
Calderón afirmó que su administración está “intensificando los trabajos” para acelerar la entrega. En el caso de la calle Zaragoza, dijo que esta misma semana se realizará el vaciado y que solicitará un acelerante para abrirla en menor tiempo. Respecto a la Segunda Del Rayo y Centenario, aseguró que los trabajos “están muy avanzados” y que también quedarán listos antes de la fecha prometida.
Sin embargo, comerciantes y habitantes de la zona recuerdan que estas mismas promesas ya se han repetido en varias ocasiones desde que comenzaron las obras, sin resultados visibles. Incluso señalaron que en semanas recientes prácticamente no se observó maquinaria trabajando, lo que contradice la versión del alcalde sobre una supuesta intensificación.
Ante el creciente descontento, Calderón minimizó las críticas y descartó que las protestas de comerciantes tengan fundamento: “Todo mundo tiene el derecho de manifestarse… se hablaba de que comerciantes querían bloquear mi negocio, pero eso está aparte de la Administración”, declaró, insistiendo en que la obra no implica aportación económica de los afectados y que se entregarán trabajos “de buena calidad”.
No obstante, la falta de avances palpables y las reiteradas promesas incumplidas mantienen viva la inconformidad ciudadana. Los comerciantes aseguran que esta vez no sólo esperan la obra terminada, sino también explicaciones claras sobre los retrasos y garantías de que no se repetirán escenarios similares en otros sectores de la ciudad.
