El Instituto Mexicano del Seguro Social en Parral atraviesa por una severa crisis que derivó ya en que suspendieron la operación de la única ambulancia que tiene la Unidad de Medicina Familiar No. 23, además de que los choferes llegaran al punto de exigir la destitución de la responsable de Servicios Generales.
Los operadores del único vehículo de emergencias con el que cuenta el IMSS en esta ciudad, pararon labores desde el pasado miércoles en protesta por la falta de pagos, de comisiones y de viáticos, lo que representa una afectación directa para los derechohabientes que requieren traslados y para otros pacientes que presentan alguna emergencia de salud.
Quienes conducen las ambulancias denunciaron abusos y abandono del Instituto. ya que no se les ha pagado desde el año pasado, salvo «abonos», pero afirman que suman meses sin percibir su sueldo íntegro.
Por si fuera poco, a la empresa arrendadora que prestaba sus servicios al IMSS, tampoco le han cubierto el adeudo, lo que obligó a que las otras tres ambulancias que cubrían el servicio en toda la región, hayan sido retiradas, ocasionando una crisis médica en la zona sur del estado.
Sin embargo, las acciones no han sido suficientes para llamar la atención del las autoridades administrativas, por lo que los trabajadores colocaron una lona en las instalaciones de la clínica en Parral con la que exigen la destitución de la jefa de los Servicios Generales en la entidad, Ana Ivette Vega, por afectar la cláusula 100 del Contrato Colectivo que se refiere s la operatividad cuando realizan algún servicio de trasladado a otros estados, donde manejan más de 20 horas sin pago de viáticos ni horas extras.
Los quejosos exigen la atención del delegado estatal, por lo que, como ya se mencionó, pararon labores desde el miércoles en espera de que atiendan y resuelvan los pagos pendientes en sueldos, comisiones y viáticos.
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